Amanecer zombie (Microrrelato)
Amanecer zombie
Tropezó y cayó de bruces contra la silla, apenas sintió el brote templado de la sangre que rodeó su mejilla, perfilando la base de su tosca nariz achatada. Los gritos cesaron cuando se incorporó, mantuvo durante un segundo aquel latido eterno que se antepuso al silencio. Sin encender la luz se arrimó a la ventana, abriendo con dos dedos una rendija en la persiana, la calle amanecía gris y azulada, vacía, distinta…
Una mujer desaliñada vagaba sobre la mediana, casi podía escuchar su ahogado lamento, la reconoció al instante por su raido pelo canoso, era la vieja panadera.
Con el torso de la mano se frotó la frente, ahora empapada en sudor frio, pálida, tibia como el hilo de sangre que penetraba por la comisura derecha de sus labios.
La tensión inundó sus venas al contemplar como la delantera de aquel coche quebraba de un seco impacto la cadera de la vieja. Se agachó atrapando sus tripas para evitar que una arcada lo delatase, aguantó la tos, el vómito y el llanto que cegaba sus ojos enrojecidos. Sus manos temblaron al ritmo de la respiración que le atenazaba los tímpanos. Atemorizado, fue incapaz de reaccionar hasta escuchar de nuevo las voces alarmadas que lo despertaron, llantos infantiles, golpes huecos, desorden…
No podía dejarse vencer por el miedo, no ahora que su vida cobraba sentido, estaba preparado y había calculado cada paso. Pensó en Marta, debía encontrarla, ponerla a salvo, protegerla, si es que aún se mantenía con vida…
Se armó, se armó de valor y se armó hasta los dientes antes de abrir la puerta de su casa. La puerta hacia el infierno…
Hacía ya tiempo que intuía en lo más profundo de su mente que aquello podría ocurrir… y todo, todo aquello que habría de suceder, sucedería de improviso, un día como hoy, de pronto, un domingo cualquiera…
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Este microrrelato ha resultado Finalista de la 1ª Convocatoria miNatura Ediciones.
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¡Jolín! ¡pues vaya domingo nos retratas! pero sí, porque no, puede suceder un domingo cualquiera. Buen micro, mantiene la tensión.
Besitos
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Elysa said this on 18 septiembre, 2011 a 19:14 |
Es que hay cada loco suelto, jeje… (y con armas…)
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Gotzon said this on 18 septiembre, 2011 a 19:22 |
Un placer , encallarme en tus relatos.
Te leo.
Saludos desde Barcelona.
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bypils said this on 18 septiembre, 2011 a 20:42 |
Bienvenida Bypils, voy a dar una vuelta por tu blog.
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Gotzon said this on 19 septiembre, 2011 a 0:38 |
Ese domingo cualquiera final cierra toda la tensión sin que se escape una gota. Muy bueno.
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montse said this on 21 septiembre, 2011 a 9:53 |
Gracias Montse.
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Gotzon said this on 27 septiembre, 2011 a 19:18 |
Creas muy bien la atmósfera, un buen relato zombi.
Saludos.
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David Figueroa said this on 27 septiembre, 2011 a 17:06 |
Un relato zombi, sin zombis… 🙂
Gracias David.
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Gotzon said this on 27 septiembre, 2011 a 19:19 |
Gotzon, un relato muy tenebroso y oscuro, a juego con el concurso. Me ha gustado como describes esta situación axfisiante y sobre todo el final en que vuelve una realidad cotidiana. Como si se pudiera dar mañana mismo.
Me ha gustado mucho, un saludo.
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Nicolás Jarque said this on 1 octubre, 2011 a 20:40 |
La verdad es que no quería que el relato aclarase si en realidad ha comenzado la invasión zombie, o por el contrario es un domingo más y todo sucede unicamente en la mente del protagonista…
Gracias Nicolas.
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Gotzon said this on 1 octubre, 2011 a 21:05 |
Lo he disfrutado, desde luego que sí. ¡Felicidades!
Un abrazo.
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Maribel said this on 2 octubre, 2011 a 0:01 |
Gracias Maribel
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Gotzon said this on 2 octubre, 2011 a 17:10 |
le falta mucha trama, ser mas especifico, el toco su rostro no entiendo esa parte. pero si es bueno tienes que mejorar
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cris fire said this on 3 marzo, 2014 a 6:56 |
Te refieres a esta parte, ¿verdad?:
«Con el torso de la mano frotó su frente, empapada en sudor frio, pálida, tibia como el hilo de sangre que penetraba por la comisura derecha de sus labios.»
bueno, si que es confusa, parece que toca a otra persona, pero es su frente (en todo el texto el protagonista permanece solo) ahora lo arreglo.
Por lo demás… solo quise plasmar a alguien que cree que un día aparecerán zombies por todas partes, una paranoia que puede solo estar en su mente… ¿o se ha convertido en algo real? eso lo dejo a la imaginación del lector…
Gracias por pasar y opinar cris.
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Gotzon said this on 3 marzo, 2014 a 8:01 |